Agradable encontrarse de pronto en Instagram con un comentario como éste acerca de mi libro Paseando por el zoco chico. Larachensemente (Ediciones del Genal, 2015), y además que lo firme de otro escritor: David Rocha. Y eso que han transcurrido siete años desde su 2ª edición, lo que significa que estos relatos siguen muy vivos.
Estos relatos parecen escritos con luz tenue. Se nutren de atardeceres desde la orilla del recuerdo. Voces de nostalgia hallaréis en su morfología. Pasados que se resisten a la voracidad del presente. Súper recomendable para cualquier puesta de sol.